Cuando te subes a una bicicleta corres el riesgo de sufrir una desafortunada caída por un despiste propio o ajeno, un fallo mecánico, la aparición de un elemento inesperado en la carretera, etc. Y es que saber como ajustar la bicicleta a cada uno es algo que no muchos ciclistas saben. Ante estas cosas poco o nada se puede hacer más allá de mantener la concentración y extremar la precauciones. Sin embargo, hay otros factores que sí se pueden controlar para evitar lesiones. Es más, la mayoría de las lesiones de los ciclistas no provienen de las caídas, sino del daño repetitivo que ocasiona un mal ajuste de la bicicleta a nuestro cuerpo.

¿Qué debemos tener en cuenta para saber cómo ajustar la bicicleta?

Tamaño

En el mundo del ciclismo el tamaño sí importa. Por eso a la hora de comprar una bicicleta siempre tendrás la posibilidad de elegir entre diferentes tallas (S, M y L). Como con la ropa, sí, pero en este caso no es una cuestión de estética sino de biomecánica, ya que la bicicleta que es perfecta para tu amigo puede ser perjudicial para ti.

Sillín

Colocar el sillín a la altura correcta es importantísimo para ahorrarnos muchos problemas físicos. ¿Y cuál es la altura correcta? No hay una vara de medir mágica, pero sí podemos guiarnos por dos indicaciones muy sencillas. Una de ellas podemos ponerla en práctica colocándonos al lado de la bicicleta de pie, ya que el sillín debe estar más o menos a la altura de nuestra cintura. La otra la podemos aplicar una vez ya sentados en el sillín, asegurándonos de que la pierna que está apoyada en el pedal de más abajo quede completamente estirada.

como ajustar la bicicleta

Un falso mito

Cuando estamos sentados en el sillín no tenemos por qué llegar al suelo con nuestros pies. Esta es una falsa creencia que no determina si el ajuste de la bicicleta es bueno o malo. No obstante, cuando hablamos de niños o de principiantes, sí es recomendable llegar al suelo para ganar en seguridad, no porque sea realmente beneficioso durante el pedaleo.

Comodidad

Muchas personas han dejado de practicar ciclismo porque el sillín les hacía daño en la zona del peritoneo. Afortunadamente, hoy día hay una amplísima gama de sillines de diferentes formas y materiales, por lo que es cuestión de dejarnos asesorar por un experto e ir probando hasta dar con el más apropiado para nuestro cuerpo. Si lo que nos echa para atrás es la dureza del asiento, los nuevos sillines de gel pueden ser una buena opción.

Calzado

Cuanto más tiempo pasemos encima de la bicicleta, más importante será la elección de un calzado adecuado. Mentiríamos si dijésemos que para dar un paseo de 15 minutos se necesita una zapatilla específica, pero también mentiríamos si afirmásemos que podemos hacer una ruta larga con cualquier calzado.

Progresión y estiramientos

Las sobrecargas musculares, los problemas en la rodilla y los dolores lumbares son las lesiones más frecuentes dentro del mundo del ciclismo. Para reducir su incidencia, es aconsejable que la duración e intensidad de nuestras carreras aumenten progresivamente y no de golpe, ya que nuestros músculos y articulaciones necesitan un periodo de adaptación. Asimismo, no debemos subestimar la importancia de los estiramientos, los baños de agua fría y los masajes al término de cada ruta. Si no lo sabes, te lo decimos nosotros: en reposo también se evitan muchas lesiones.

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