Antes de que podamos contar cuales son los beneficios de esta terapia hay que señalar que esto depende del modo en que aplicamos el tratamiento. Es decir, la diferencia principal parte del electrodo que empleamos. El electrodo capacitivo tiene la función de aportar un efecto calor-térmico en tejidos más superficiales, como por ejemplo las fascias, vísceras, músculos o el sistema circulatorio. El electrodo resistivo en cambio ofrecerá un efecto térmico más profundo, alcanzando así ligamentos, tendones o huesos. Una vez explicado esto, las dolencias/patologías/lesiones sobre las cuales podemos actuar con la tecarterapia son muchas y los beneficios que obtenemos son: