Durante un proceso de rehabilitación, de recuperación tras una lesión, o de tratamiento del dolor ante un proceso agudo o crónico, es de vital importancia el estilo de vida del paciente. Dentro del cual, se incluyen los hábitos alimentarios ,la actividad física, y el manejo del estrés, entre otros.
Hay fisioterapeutas (me incluyo entre ellos) que consideran que el 40{5ec260d4dfdec9d885b4f4a948b8868b285194a6e2ffd996c488fffa987eb6ab} de la recuperación del paciente depende del tratamiento recibido en su clínica, y el 60{5ec260d4dfdec9d885b4f4a948b8868b285194a6e2ffd996c488fffa987eb6ab} restante dependerá del paciente. Por una parte, de los ejercicios realizados en su domicilio y pautados por el fisioterapeuta (30{5ec260d4dfdec9d885b4f4a948b8868b285194a6e2ffd996c488fffa987eb6ab}) y por otra parte, de su estilo de vida, donde incluimos, como hemos dicho, los hábitos alimentarios (30{5ec260d4dfdec9d885b4f4a948b8868b285194a6e2ffd996c488fffa987eb6ab}),
Es por esto por lo que me gustaría dedicar este post a la alimentación, la gran aliada de la recuperación tisular, y la gran responsable de facilitar un estado de equilibrio en el organismo.
Una alimentación adecuada puede proporcionar niveles óptimos de nutrientes para el mantenimiento y la regeneración del organismo, permitiendo conseguir una eficiente y rápida recuperación del paciente.
Cada vez somos mas conscientes de que los malos hábitos alimenticios pueden generar problemas de salud, que pueden llegar a ser muy serios, si el déficit de determinados nutrientes se extiende durante un tiempo.
Además de esto, existen determinados alimentos que son pro- inflamatorios, que (como su propio nombre indica) favorecen el estado inflamatorio y ayudan a desarrollar la inflamación, y a mantenerla en el tiempo. La inflamación es un proceso natural y necesario que se produce en todos los organismos. La respuesta inflamatoria es consecuencia de una lesión en los tejidos vascularizados, y que sirve como mecanismo de defensa frente a agentes dañinos. Durante el desarrollo del proceso inflamatorio, el sistema inmune desencadena varios cambios metabólicos, celulares y hormonales que son los responsables de enviar los agentes antiinflamatorios a la zona afectada.
Sin embargo, la situación se agrava cuando la inflamación se produce de forma continua y desenfrenada, generando cambios celulares y evitando la recuperación de los tejidos.
A continuación os voy a enumerar aquellos alimentos que son considerados pro- inflamatorios:
- Harina refinada de trigo u otro cereal (pan , pasta, arroz , galletas…)
- Carnes grasas de cerdo y vacuno.
- Embutidos
- Leche de vaca y derivados lácteos (quesos, nata y mantequilla)
- Patatas
- Bebidas alcohólicas y refrescos gaseosos y azucarados.
- Azúcar
- Fritos
- Los productos transformados (a causa de colorantes , conservantes , saborizantes, aromatizantes y todos los otros productos químicos que tienen)
- Alimentos ricos en ácidos grasos omega 6 (aceites vegetales de soja, algodón, maíz y girasol)
Por lo tanto, estos alimentos deberíamos poco a poco ir eliminándolos de nuestra dieta, tanto para mejorar en el caso de que padezcamos alguna enfermedad, lesión o dolencia, como para mantenernos sanos y equilibrados, previniendo la aparición de las mismas.
Existen otros alimentos que son considerados antiinflamatorios, y que deberíamos incluir de forma habitual en nuestra dieta. Algunos de ellos son:
- Alimentos ricos en ácidos grasos omega 3 (pescados como la sardina , el atún , el arenque , la caballa y el salmón, algas marinas, semillas de chía, semillas de lino, nueces, almendras…)
- Verduras y hortalizas (ajo crudo, cebolla , espinacas , tomate y pimiento rojo)
- Legumbres (frijoles, lentejas, guisantes , garbanzos y soja)
- Tés de hierbas (especialmente el té verde y el romero)
- Clara de huevo
- Frutas (especialmente frutas de color amarillo, naranja y rojo, ya que tienen antocianina)
- Aceite de oliva virgen extra
- Jengibre
- Crucíferas (brócoli , col , coliflor , nabo, rábano y repollo)
- Alimentos ricos en vitamina C (cítricos y brócoli)
- Alimentos ricos en probióticos (bacterias que tiene acción anti-inflamatoria en el intestino).
Con esta información sólo nos gustaría daros algunas nociones sobre como influir en vuestra recuperación y como ayudar al organismo a mantenerse saludable y equilibrado. Y os recordamos que con buenos hábitos alimentarios ayudareis a disminuir esos síntomas con los que acudís a consulta. ¡Sois parte activa de vuestro tratamiento!
“Cuida tu cuerpo. Es el único lugar que tienes para vivir” (Jim Rohn)