Hacer Pilates está de moda. De hecho, es el método de entrenamiento del que todo el mundo habla. Un método que no entiende de sexo ni de edades, de ahí que lo practiquen hombres, mujeres, jóvenes, personas mayores, embarazadas, lesionados… Y es tan entretenido que puede llegar a ser adictivo en el buen sentido de la palabra. Pero, llegados a este punto, todo no iniciado se hace la misma pregunta: ¿para qué sirve exactamente el método Pilates?
Objetivos
En primer lugar cabe subrayar que el método Pilates es lo suficientemente flexible y versátil como para adaptarse a cualquier persona y sus circunstancias. Por tanto, las sesiones que realicen un grupo u otro pueden diferentes, si bien los beneficios que se obtienen, en mayor o menor medida, son los mismos. Y es que el método Pilates sirve principalmente para movilizar músculos que habitualmente no utilizamos o que utilizamos de manera incorrecta, consiguiendo con ello un mejor equilibrio en nuestro cuerpo y una higiene postural adecuada a nuestra constitución.
La mente
El Pilates no sólo se centra en el cuerpo, sino también en la mente. De hecho, los ejercicios están encaminados a ocupar nuestros cinco sentidos, logrando así que desconectemos de nuestras preocupaciones y rutinas diarias. Esta es precisamente una de las claves de su éxito, sin olvidar lo entretenido que resulta siempre practicar una actividad física en grupo en lugar de en solitario. Si sufres estrés, el Pilates puede ser tu mejor ‘medicina’.
Elementos
A medida que vamos familiarizándonos con el método Pilates podemos ir incorporando diferentes elementos a nuestros ejercicios. Los más habituales son las pelotas, los rolos, las barras y las bandas. Los rolos (rodillos) son muy útiles para ganar estabilidad, mientras que las bandas (sogas) nos permiten inmovilizar una parte del cuerpo para fortalecer otras. Con constancia, la supervisión de un monitor y la ayuda de todos estos elementos se pueden conseguir mejoras sustanciales a nivel de agilidad, coordinación, equilibrio, tonificación y respiración.
Conclusiones
En definitiva, el método Pilates es un gran opción para recuperar la vitalidad que creíamos haber perdido al tiempo que aparcamos el estrés y nos socializamos con nuestros compañeros. En nuestra clínica, además, tenemos grupos especiales para madres y bebés, pero de eso hablaremos largo y tendido en otro artículo.