El dolor cervical es una de las molestias más frecuentes en consulta y suele aparecer por tensión muscular, malas posturas, estrés, sobrecarga o falta de movilidad de las vértebras cervicales.
La zona del cuello es especialmente sensible a las posturas mantenidas, al uso prolongado de ordenador o móvil, al bruxismo y a gestos repetitivos con cabeza y hombros.
En Clínica Bailío realizamos una valoración completa del rango de movimiento, musculatura profunda, articulaciones cervicales y patrón postural para determinar el origen exacto de la molestia y aplicar el tratamiento más eficaz.
Estas son algunas de las causas más habituales:
El dolor cervical suele ser benigno, pero debes prestar atención si aparece alguno de estos signos:
En estos casos realizamos pruebas específicas para valorar si existe compresión nerviosa, bloqueo articular o una disfunción cervical alta.
Utilizamos fisioterapia avanzada y técnicas específicas para aliviar el dolor y recuperar la movilidad del cuello:
El objetivo es reducir la tensión, mejorar la movilidad y prevenir recurrencias.
Las posturas mantenidas, el estrés y la falta de movilidad torácica son causas habituales de tensión cervical.
Sí, una disfunción cervical alta puede alterar la propiocepción y generar sensación de inestabilidad.
Sí, es muy eficaz para relajar la musculatura profunda y acelerar la recuperación.
Mantener buena postura, hacer ejercicios de movilidad y fortalecer la musculatura profunda ayuda muchísimo.