El ciclismo es el deporte más practicado en España actualmente. No lo decimos nosotros, sino la Encuesta de hábitos deportivos en España, realizada en 2015 por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. La fiebre por la bicicleta de los últimos años ha llevado a un tercio de la población a subirse a ella con cierta frecuencia, siendo nuestra salud la gran beneficiada. No obstante, el ciclismo, como toda actividad física, implica ciertos riesgos, como pueden ser los accidentes o las lesiones típicas de esta modalidad, a las cuales dedicaremos este artículo.
A continuación os explicamos cuales son normalmente las lesiones en el ciclismo:
Estas son las lesiones en el ciclismo:
Tendinitis aquílea
Surge principalmente por un sobreesfuerzo en el tendón de Aquiles, aunque también puede ser la consecuencia de tener el sillón demasiado alto o de una mala postura de los tacos de la zapatilla.
Tendinitis rotuliana
Hablamos de la inflamación del tendón que se encuentra justo debajo de la rodilla. Al contrario que la lesión anterior, puede ser ocasionada por tener el sillón demasiado bajo o por haber permanecido durante mucho tiempo con grandes marchas. Para tratarla es recomendable acudir un fisioterapeuta, y para evitarla, modificar la cadencia de pedaleo y ajustar el sillín correctamente.
Túnel carpiano
Estar horas y horas con las manos en el manillar puede desencadenar el síndrome del túnel carpiano, que se manifiesta con una falta de sensibilidad u hormigueo en los dedos.
Fracturas
Los huesos que más suelen romperse tras una caída son la clavícula y el escafoides. Cuando la clavícula se fractura el dolor es muy fuerte, pero con el escafoides no siempre sucede lo mismo y muchas veces, por confiarnos y confundir el percance con una mera contusión, agravamos el problema. Los más experimentados en el mundo del ciclismo recomiendan mantenerse agarrado al manillar cuando suframos una caída para mitigar el daño.
Dolores en cuello o espalda
Estar muchas horas encima de la bicicleta en una postura no del todo natural puede acarrear dolores en el cuello y/o en la espalda. Un buen calentamiento ayuda, al igual que no abusar de carreras largas si no gozamos previamente de una buena condición física.
Si eres un amante de la bicicleta y sufres alguna de estas lesiones, no dudes en acudir a nosotros para recuperarte con las mayores garantías.